PASAJE DEVOCIONAL: GÁLATAS 2:19-21
No desecho la gracia de Dios; pues si por la ley fuese la justicia, entonces por demás murió Cristo. (GÁL. 2:21)
Vivimos en un mundo confuso y lleno de contradicciones. Tanto en las instituciones gubernamentales como en las financieras y empresariales, todavía no han podido descifrar con exactitud la catástrofe que ocasionó la caída de los mercados a nivel global. Estamos rodeados de expertos en explicaciones complejas que no llegan a ninguna conclusión efectiva. ¿Te sorprende eso? Pues espera más y más leyes, legislaciones, decretos y regulaciones que complicarán mucho más las cosas. Para comprobarlo solo tienes que navegar por el Internet y observar las ideas y sugerencias cada vez más difíciles de entender.
Del mismo modo a través de los siglos han surgido personas y denominaciones que se han dedicado a desarrollar un intrincado mundo religioso. En contraste, el evangelio de Jesucristo es simple y sencillo. No nos corresponde a nosotras meter la mano en el plan redentor del Señor. Hay algunos creyentes que aún actúan como si la muerte de Cristo hubiera sido en vano. Muchos reemplazan la ley judaica por el legalismo cristiano. Es triste, pero para algunas iglesias es más importante lo que dice la constitución que lo que dice la Biblia. Para otros es más importante seguir lo que aprendieron por tradición que lo que puede transformar un corazón. Cada vez surgen más leyes extras para ganar la aceptación de Dios. Jesús luchó contra esas tendencias. Todo tiene un límite. Llegará el día en el que los que creen que pueden ser salvos por ser buenos estarán frente al que murió por ellos. ¿Qué le dirán?
Confiemos en el poder de Dios para nuestra salvación y para nuestra transformación. Confiemos en lo que hizo Cristo en la cruz por nosotras. Para las que todavía se complican la vida, escuchen: Jesús y Su muerte en la cruz del Calvario son el único camino. Dios lo determinó así y nosotras no podemos cambiarlo. Y si lo desean, digan conmigo esta frase que me gusta mucho: «Dios lo hizo, yo lo creo, y así es».
Pídele a Dios que te ayude a ser una hacedora de Su voluntad.
Un devocional de Devoción para el corazón (B&H en Español)