El Señor es mi Pastor; tengo todo lo que necesito. —NTV
SALMOS 23:1
Si tuvieras que ser un animal, ¿cuál elegirías? He oído muchas respuestas:
delfín, mariposa, tigre, incluso araña, pero difícilmente escucho la palabra: oveja. Sin embargo, Dios usó a dicho animal para hablar de nosotros, Su rebaño.
A diferencia de otros animales que tienen garras o filosos dientes,
púas o veneno, o que pueden mimetizarse con el ambiente y esconderse
de sus depredadores, las ovejas requieren de un pastor que las
alimente, cuide y defienda.
Los seres humanos somos frágiles. Necesitamos de un pastor, y Jesús
quiere serlo, si se lo permitimos. Él es un Pastor que ya dio Su vida por
nosotros, y que promete que nada nos arrebatará de Su mano. Aún
más, este Pastor nos ha dado todo lo que necesitamos.
¿Todo? ¿Y qué de las muchas cosas que aún anhelamos, desde un
auto hasta un novio? Podemos decir con confianza que en Él tenemos
todo lo que necesitamos. Al ir conociendo más a tu Pastor, comprenderás
que no hace falta más que Su presencia para transitar por este
sendero llamado vida, y que Él te guiará a los mejores pastos. Confía
en Él, y Él hará. (KOH)
Ya que mi Pastor es Cristo, tengo todo lo que necesito.