• Skip to content
  • Skip to secondary menu
  • Skip to primary sidebar

Lifeway Mujeres

Lifeway Mujeres

  • Inicio
  • Estudios Bíblicos
  • Libros
  • Biblias
  • ARTÍCULOS
  • AUTORAS
    • Aixa de López
    • Cathy de Nuñez
    • Patricia Namnún
    • Wendy Bello
    • Karla de Fernández
    • Dámaris Carbaugh
    • Liliana Llambés
  • Podcast

Cuidado

El evangelio y el cuidado del anciano

August 17, 2022 By lifewaymujeres Leave a Comment

Por Betsa Arcos

Ponte de pie en la presencia de los ancianos y muestra respeto por las personas de edad. Teme a tu Dios. Yo soy el Señor.  Levítico 19:32 

Honra: ka·vóhdh en hebreo, literalmente significa «peso». Demostración de aprecio que se hace de alguien por su virtud y mérito. De gran estima y respeto. De gran valor. 

Cuando corrijas a un anciano, no lo regañes; al contrario, aconséjalo como si fuera tu propio padre. Trata a las ancianas como a tu propia madre, a los jóvenes como a tus hermanos, y a las jóvenes como a tus hermanas, es decir, con todo respeto. 
1 Timoteo 5:1-2 

A lo largo de la Palabra, Dios nos exhorta a honrar (respetar y tener en estima) a nuestros mayores (Ex. 20:12, Ef. 6:2). Esto tiene como promesa largura de días, pero también Dios nos advierte que de lo contrario nuestros días serán acortados (Prov. 20:20). 

Nos manda a comenzar por los de nuestra casa (incluyendo la iglesia), a ser piadosos con nuestra propia familia y hermanos en Cristo, a ver por ellos, auxiliarlos y proveerles de lo necesario. Todo esto agrada al Señor, porque de lo contrario negaremos la fe, seremos peor que un incrédulo. Recordemos que la fe sin obras es muerta, podemos decir ser creyentes, pero nuestros actos hablarán otra cosa (Sant. 2:14-26). 

Honra a las viudas que en verdad lo son. Pero si alguna viuda tiene hijos, o nietos, aprendan éstos primero a ser piadosos para con su propia familia, y a recompensar a sus padres; porque esto es lo bueno y agradable delante de Dios […] porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor que un incrédulo. 
1 Timoteo 5:3-4, 8 

«… y a recompensar a sus padres; porque esto es lo bueno y agradable delante de Dios…» Aquí Pablo está instruyendo a su colaborador Timoteo, explicándole cuál debe ser la conducta característica de los miembros de la iglesia. Esta (la iglesia cristiana primitiva) actuó cuidando a los pobres, los ancianos, los enfermos, las viudas y los huérfanos que no tenían a nadie más para cuidarlos.  

En los tiempos actuales, un anciano podría considerarse como una carga en un hogar, por los cuidados y atención que requiere, los gastos que se pueden generar en cosas especiales para ellos o en atender alguna enfermedad. Esa podría ser la manera de pensar de un corazón cauterizado y frívolo, de un corazón que no ha tenido un encuentro con Jesús. No nos dejemos llevar por lo que el mundo dicte. 

La Palabra dice claramente, en el versículo anterior que debemos aprender a «recompensar a nuestros padres». Solo basta ponerse a pensar en lo que una persona anciana ha vivido, imaginar por lo que muchos de nuestros padres y madres han pasado por darnos lo mejor, a su manera, pero hicieron su mejor esfuerzo.  Dios ha visto todos los sacrificios que nuestros viejitos han hecho por nosotros, ha visto la intención de sus corazones por hacer algo a nuestro favor. Cuando ellos necesitan cuidado, a veces olvidamos esos sacrificios.  

En ocasiones, por las vivencias duras que hemos tenido con nuestros mayores, creemos que no merecen nuestras atenciones y cuidados, recordemos que no somos jueces para levantar juicio y decir que hicieron bien o que hicieron mal, que merecen y que no merecen. Recuerda qué merecíamos nosotras por nuestros pecados, en cambio no se nos dio lo que merecíamos, sino que por gracia se nos dio redención. 

Un corazón agradecido, recompensa a sus padres y abuelos honrándoles, cuidando de ellos, proveyéndoles, viendo por ellos como ellos algún día lo hicieron. Tengamos presente que cuando honramos y cuidamos de nuestros padres y ancianos, también estamos sirviendo y honrando a Dios. Si bien ellos son el reflejo de Dios para con nosotros ya que nos proveyeron, nos cuidaron, nos protegieron, nos dieron refugio, consejo y en su momento nos corrigieron (Prov. 19:18), ¿no es lo que Dios ha hecho y cómo ha sido con nosotros?  

Dios tiene cuidado especial por los desvalidos, entre ellos los ancianos, y le son de gran estima y honra, solo basta echar un vistazo al libro de Proverbios. En los ancianos puedes encontrar la sabiduría adquirida de un largo caminar por la vida, aunque a veces encontramos sus consejos como algo anticuado sin valor y llegamos a menospreciar esas palabras llenas de sabiduría. 

No nos cansemos de hacer el bien, el evangelio significa que no merecíamos nada más que la muerte por nuestras transgresiones. Fue por Su gracia que no miró más nuestros pecados. Dios dio lo más preciado: Su Hijo. Claro que ningún sacrificio podrá ser comparado con el que Dios hizo por nosotras, pero como hijas de Dios, vivamos la fe, demos testimonio de lo que el evangelio es a través del cuidado de los nuestros en obediencia al Señor. Seamos más como Cristo, seamos piadosas. 

Aún si tu vivencia con tu padre, madre o algún anciano en casa ha sido difícil, solo te puedo decir: PERDONA de la manera que fuiste perdonada por el Señor. Y pregúntate que legado estás dejando a los que vienen detrás de ti. ¿Estás dejando buena enseñanza de vivir la Palabra honrando a tus mayores sin esperar nada a cambio? Entiendo que si atravesaste algo terrible no quieras repetir lo mismo, y eso es bueno, pero comienza un nuevo caminar cimentada en la Roca que es Cristo, y estoy segura de que cuando llegues a tu vejez o si ya estás en esa etapa, verás frutos. 

¡Haz que tu padre y tu madre se alegren! ¡Haz que se regocije la madre que te dio a luz! 
Proverbios 23:25 


Betsabé Arcos (conocida como Betsa Arcos), pecadora salvada por gracia y redimida por Jesucristo. Coordinadora de redes sociales de Lifeway Global, Biblia de apuntes (Fb/IG). Miembro de la Iglesia Provisión para mi Vida, Toluca, MX. Sirviendo a Dios a través del acuarela apoyando a misioneros e iglesia perseguida en Medio Oriente. Puedes encontrarla en Instagram como @betsa.arcos (clic en el nombre de usuario).

El evangelio y el cuidado del huérfano

August 10, 2022 By lifewaymujeres Leave a Comment

Por Mirna Espinoza

El pastor observó su rebaño y contó cada uno de sus animalitos peludos, al saber exactamente quiénes le correspondían bajo su cuidado se dio cuenta que faltaba una. ¿Qué es una si vemos que hay noventa y nueve que están en donde deberían? Pero el pastor no consideraba a una como algo inferior, sino corrió tras ella, a buscarla, a traerla de vuelta, a recordarle a ese animalito torpe y necio que su hogar ya no es aquel lleno de soledad sino uno donde puede estar acompañado, protegido y seguro. 

Y allí, deambulando solitaria, probablemente angustiada al contemplarse rodeada de pasto y piedras, observó bajando de una colina, corriendo precipitadamente hacia ella, a su buen pastor. La tomó, no arrastrada, no forcejeando, sino en Sus hombros, cargando Él mismo todo el peso, la tomó para traerla de vuelta a donde pertenecía. Porque eso hace Él, busca, ama y protege a los Suyos. A los rebeldes, a los impíos, a los desobedientes, a los solitarios, a los que no tienen voz, a los huérfanos. 

«Padre de los huérfanos y defensor de las viudas es Dios en Su santa morada. Dios prepara un hogar para los solitarios […]» Salmo 68:5-6a 

La oveja que se pierde y que es encontrada somos tú y yo, somos aquellos que prefieren la soledad y el abandono con tal de no seguir las normas buenas de un Dios soberano. Éramos huérfanos, todos aquellos que no conocen al buen Padre aún permanecen en orfandad, incluso sin saberlo, y nosotros que por gracia hemos escuchado la voz del Señor, podemos reconocer nuestra antigua posición de desvalidos, de solitarios y de huérfanos. 

«Nos predestinó para adopción como hijos para sí mediante Jesucristo, conforme a la buena intención de Su voluntad». Efesios 1:5 

Y ahora al saber que Dios protege al huérfano, que nosotros éramos huérfanos y por amor nos hizo hijos, ¿qué deberíamos pensar y hacer por los vulnerables? ¿Cuál es ese cuidado al huérfano del cual habla el evangelio? 

Los huérfanos, los que se encuentran institucionalizados, o abandonados. Criados bajo abandono, negligencia o abuso. Aquellos para quienes la palabra «seguridad» es como si estuviera en otro idioma y la palabra «amor» pareciera un cuento de hadas ficticio, porque nunca lo han visto a los ojos. Aquellos niños que en ninguna circunstancia han decidido criarse solos o rodeados de desconocidos que van y vienen de sus vidas sin dejar huellas profundas y perdurables. Aquellos que permanecen aislados de la sociedad porque es difícil verlos a los ojos y no conmovernos, pero a la vez, el acercarnos, requeriría grandes sacrificios que quizá no estamos dispuestos a cumplir. 

Acércate iglesia, ve a los ojos a esos niños que necesitan conocer el amor, porque lo único que les han susurrado al oído es el temor. Acércate iglesia a ver a los ojos que cuentan ríos de historias difíciles de escuchar, pero que si no son contadas serán arrastrados los corazones que permanecen en silencio. Está presente iglesia incluso si te quita tiempo, porque tiempo es lo que ellos no han recibido jamás. Abraza y siente un palpitar que va a un ritmo diferente al tuyo y mantente tan cerca como puedas para que eventualmente se sincronicen y pertenezcan el uno al otro. 

¿Cuál es el llamado del evangelio hacia el cuidado del huérfano? Exactamente el mismo que nuestro Dios tuvo hacia nosotros. Él no nos pedirá algo que Él no haya dado y suplido ya, solamente nos guiará a ser espejos de Su gran bondad. Y definitivamente no se trata que vayamos a ser salvadores, porque salvación solo proviene de Uno. Pero sí podemos ser lugares seguros que muestren a gritos por medio de afecto el amor eterno, de Cristo.  

Porque cuando nos acerquemos y veamos una vida a profundidad nos daremos cuenta que no son tan diferentes a nosotros en realidad. Podemos compartir corazones rotos, pasados difíciles, risas provocadas por chistes malos, una comida favorita similar y sobre todo compartir la esperanza eterna que no generará lazos que un par de años van a durar, sino unos que permanentemente y para siempre permanecerán. Pero no podremos crear lazos eternos si no nos acercamos y cumplimos con nuestro llamado de ser como Cristo. Ser la luz del mundo jamás se tratará de brillar y recibir aplausos, se tratará más bien de contemplar la belleza cotidiana, compartir el pan y hablar del amor que se nos ha dado. 

Recuerda que eras huérfano y ahora puedes compartir la vida y esta buena noticia con alguien más, señalando a su verdadero Padre, que lo ama, que lo espera, que lo busca y que le dará el amor que siempre ha necesitado y que jamás va a cesar. 

«La religión pura y sin mancha delante de nuestro Dios y Padre es esta: visitar a los huérfanos y a las viudas en sus aflicciones, y guardarse sin mancha del mundo» Santiago 1:27. 


Mirna Espinoza, guatemalteca con un corazón rebelde que es constantemente corregido por Dios. Salvada por gracia y sin merecerlo. Siempre estudiante y nunca maestra. Sirve al Señor siendo colaboradora para Lifeway Mujeres, en su iglesia local y escribiendo en su blog personal Eufonía, IG: @eufoni.a (para visitarlos solo da clic sobre el nombre del blog y/o sobre nombre de usuario de Instagram)

Primary Sidebar

Nos alegra saber que estás aquí. En este blog encontrarás artículos, devocionales y notas interesantes para tu vida. También podrás conocer de nuestros Estudios Bíblicos, Libros y Biblias. Pero, mayormente, encontrarás una comunidad de mujeres que quieren conocer a Dios y Su Palabra, y vivir de manera diferente gracias a Él.

Conoce más acerca de nosotras ►
Síguenos en FB 
Síguenos en Instagram 
Suscríbete a nuestro canal de YouTube 

RECIBE INFORMACIÓN Y NUESTRO PLAN DE ORACIÓN FAMILIAR

¿Lista para ser parte de nosotras y recibir cada mes nuestro Plan de oración familiar? Ingresa tu correo electrónico y haz click en «Inscribirse». Es así de fácil.

Puedes adquirir estos recursos en tu librería cristiana favorita: ESTADOS UNIDOS AMÉRICA LATINA

CATEGORÍAS

LO MÁS LEÍDO

  • CREADA PARA SER FUERTE
  • Creada para ser confiada (Pr 31:25)
  • Ya no siento amor por mi pareja.
  • ¿Qué es el ministerio para las mujeres y por qué es necesario?
  • QUE TU HIJO NO SEA “EL MUCHACHO CONSENTIDO”
Eventos Button Image

Copyright © 2023 · Lifeway Christian Resources All Rights Reserved

Cleantalk Pixel