PASAJE DEVOCIONAL: GÉNESIS 2:15-17
… mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás. (GÉN. 2:17)
En el huerto del Edén, Adán y Eva tenían todo lo que necesitaban. Vivían en perfecta armonía en un lugar hermoso donde podrían disfrutar de todas las cosas menos de una, el árbol del que Dios les había dicho que no comieran. El propósito de Dios al prohibirle al hombre que comiera de ese árbol no era limitar su libertad ni tampoco mantener en oculto el conocimiento. Lejos de eso, su deseo era y sigue siendo protegernos del mal y de que nos alejemos de Su presencia. Él sabía lo que pasaría y hoy día sigue conociendo nuestro futuro. Es por eso que muchas veces Su respuesta hacia nuestras peticiones es un no, porque Él sabe lo que eso puede traer a nuestra vida.
Cuántas veces pensamos en todo el dolor que nos hubieran evitado Adán y Eva si hubieran obedecido el mandato de Dios de no comer del árbol de la ciencia del bien y del mal. Creemos que nosotras no hubiéramos hecho lo mismo, cuando en realidad si hubiésemos estado en su lugar habríamos actuado de la misma manera. Es parte de nuestra naturaleza querer hacer nuestra voluntad, aunque esta vaya en contra de lo que Dios nos ha dicho.
Cada deseo que nos es negado no deberíamos tomarlo como una injusticia o desamor de nuestro Padre. Nuestro corazón necesita aprender a aceptar la voluntad de Dios y, más que nada, necesitamos aprender que los planes de Dios para nosotras siempre serán buenos. Si Él nos está diciendo que no a algo es para guardarnos y librarnos de algo que nosotras, en nuestra sabiduría limitada, desconocemos, pero que Él en Su infinito conocimiento ya sabe.
Señor, ayúdanos a entender con paz cuando Tú nos dices que no.
Un devocional de Devoción para el corazón (B&H en Español).