PASAJE DEVOCIONAL: 2 REYES 18:1-7
En Jehová Dios de Israel puso su esperanza; ni después ni antes de él hubo otro como él entre todos los reyes de Judá. (2 REY. 18:5)
Creo que a todas nos gustaría que al final de nuestra vida nos recordaran como se recuerda a Ezequías, rey de Judá: «el rey que hizo lo bueno ante los ojos de Dios». Existen algunas razones por las cuales el rey Ezequías agradó a Dios. Cuando llegó al trono, quitó los lugares de adoración paganos que el gobernante anterior había permitido. Hizo las reformas necesarias confrontando a los sacerdotes y a los idólatras por el pecado que estaban cometiendo. En su reino no había lugar para esa clase de actividades porque el rey pensaba que su reino pertenecía a Dios y toda la alabanza y adoración serían solamente a Él. Decidió mantenerse en los caminos de Dios y con tenacidad mantener la nación buscando la dirección divina. Ese es el legado que nos deja Ezequías.
Si queremos un avivamiento espiritual en nosotras, en los hogares, en nuestra iglesia y en nuestra comunidad, entonces tenemos que tomar decisiones valientes que agraden a Dios y nos acerquen a Él. Esta es la herencia preciosa que podemos dejar a nuestros descendientes, un legado basado en el respeto y en la adoración al verdadero Dios donde no hay lugar para esos dioses falsos que destruyen a las familias, a los gobernantes y a las naciones. Hay dioses modernos que ocupan el lugar que solamente pertenece a Dios. No podemos decir: Señor, te entrego toda mi vida excepto mis finanzas, mis relaciones, mi diversión y mis planes futuros. Para que se logre un avivamiento espiritual, debemos dejar que el Espíritu Santo tome el control de nuestra vida y volvamos nuestros ojos al Señor. La salvación es el fundamento para lograr una vida espiritual exitosa. La salvación se produce cuando nos arrepentimos de nuestros pecados y pedimos a Dios que nos perdone por medio de Jesucristo. Este cambio es para siempre y nos permite poner nuestra confianza en Dios, quien es poderoso para librarnos del más fuerte de los enemigos.
Ora dando gracias a Dios por Su fidelidad.
Un devocional de Devoción para el corazón (B&H en Español).
